Descripción
Dándole vueltas al amor, haciéndolo
visible, dando luz a sus oscuros
rincones, girándolo, poniéndolo
de perfil, encajándolo
en sus goznes para que gire y gire.
Porque hay veces que llega
como una caravana de tesoros
por el desierto y necesita aquella
antigua fortaleza que cerraba
sus puertas al anochecer, y llega
otras veces como un tifón y hay
que limpiar de maleza su terrible
trayectoria, y a veces como un barco
que naufraga y hay que encontrarle un hueco
entre corales y entre algas en los fondos
marinos.
Y guardarlo un tiempo
y olvidarlo.
Tal vez resurja un día. Pero
si no estamos nosotros,
¿quién será quien lo acoja y le dé vida?
Valoraciones
No hay valoraciones aún.